El lanzamiento del satélite soviético, Sputnik, fue desmoralizante para Estados Unidos durante la guerra fría. Sin embargo, las señales de radio transmitidas desde ese satélite brindaron a los científicos norteamericanos el marco conceptual para desarrollar el sistema de posicionamiento global (GPS). Hoy, la tecnología GPS está integrada en todo tipo de aplicaciones, más preponderantemente en aquellas destinadas a mejorar la seguridad, pero también para el seguimiento de flotas.
Operación con vehículos autónomos
Los vehículos autónomos han puesto sus ruedas en las carreteras del país y se apoyan en la tecnología GPS para navegar con seguridad. Esta tecnología traza detalles vitales del automóvil, como son su ubicación, velocidad y dirección. Luego, la computadora en el vehículo utiliza los datos GPS, junto con los obtenidos por cámaras y otros sensores, para navegar hasta su destino.
Confiar exclusivamente en la visión humana para impedir colisiones en una mina no es factible, ya que la escasa visibilidad, los puntos ciegos y la intensidad del tránsito son todos factores que pueden inhibir la detección a tiempo de una potencial coalición. Es por eso que Hexagon ha desarrollado el sistema anticolisión basado en GPS, que se puede integrar en todos los vehículos de mina para proteger activos y operadores.
Seguimiento de flota
Antes del GPS, los modelos de flujo de camiones en una mina se mejoraban a través de programas centralizados de optimización computarizada que utilizaban técnicas de programación lineal, junto con sistemas procesadores beta instalados en los camiones. Los operadores recibían pequeños mensajes de texto en paneles remotos en campo, donde se les indicaba la asignación de la próxima pala o el punto de descarga asignado. Antes del GPS, realmente no se podía rastrear en todo momento hacia donde estaba yendo un camión. La ubicación solo era conocida cuando el vehículo estaba dentro del radio de distancia de transmisión de un haz RF de baja potencia.
Cuando, en 2003, Jonathan Olson y Sergio Blacutt, miembros del equipo de Hexagon, formaron Jigsaw Technologies, el predecesor de HxGN MineOperate OP Pro, la idea era desarrollar un sistema de gestión de flotas (FMS) más moderno. Este FMS utilizaría las tecnologías de bases de datos distribuidas para aprovechar las ventajas del monitoreo GPS y recopilar de manera continua información de a bordo del vehículo. Los sistemas anteriores estaban basados en una computadora central, como la VAX-11/780, con un costo de aproximadamente $1 millón, con casi una milésima de las capacidades de un teléfono inteligente de hoy.
Gracias al GPS, ahora sabemos segundo a segundo, exactamente en qué lugar de la ruta está el camión, qué está haciendo y cuándo llegará. Nos ha permitido desarrollar sistemas mucho más inteligentes que integran ciclos de acarreo automatizados y detectan la descarga de cada palada en la caja del camión.
Evitar que los seres queridos deambulen y se pierdan
La gente mayor con Alzheimer y las personas con autismo tienen un mayor riesgo de alejarse del hogar u otros lugares seguros, y perderse. Puede que tampoco respondan cuando las personas encargadas de su búsqueda las llaman por sus nombres. Deambular y perderse constituye un riesgo de seguridad grave, ya que estas personas vulnerables pueden ingresar en zonas de tránsito o caer en cursos de agua. Afortunadamente, existen muchos tipos de dispositivos de seguimiento basados en GPS, incluso pulseras, que pueden llevar puestas y, así sus seres queridos pueden localizarlos rápidamente en caso de que se pierdan. Algunos de estos dispositivos de seguimiento GPS incluyen tecnología de barreras geográficas, que envían una alerta al teléfono de los miembros de la familia cuando la persona se desplaza fuera de una zona determinada.
Prevenir el ataque de tiburones
En comparación con los accidentes de tránsito, las lesiones y muertes por ataques de tiburones afectan a una cantidad relativamente pequeña de personas por año. No obstante, el potencial de un ataque de tiburones aterroriza a los veraneantes en las playas de todo el mundo. Los científicos han colocado etiquetas GPS en muchos tiburones, y algunos de estos dispositivos envían alertas a los guardavidas cuando esos animales se acercan demasiado a playas pobladas. Esto permite que los bañistas salgan del agua antes de que se produzca un ataque.